Uno de los problemas que deben enfrentar los pequeños que esperan ser trasplantados, es que se requieren de ciertos requisitos dentro de sus viviendas, para poder entrar a la lista de espera. No todos cumplen con ellos y peor aún, de ese porcentaje, hay familias que no tienen los medios económicos para realizar estos cambios estructurales, por lo que los niños quedan fuera del sistema, esperando que alguien los pueda ayudar a salir de esta difícil situación. Tomando en cuenta este grave problema, Corporación MATER en alianza con Fundación Hábitat para la Humanidad, realizan un esfuerzo conjunto para habilitar viviendas que les permitan a los pequeños, cumplir con cada uno de los requisitos y mejorar su calidad de vida.

 Benjamín,  se dializa desde los 4 años en el hospital Luis Calvo Mackena. El pequeño vive de allegado en casa de su abuela, con su hermano menor y su padre, y debían hacer varios cambios en su vivienda; sin embargo, su difícil situación económica lo hacían imposible.

Gracias a un esfuerzo conjunto, MATER y Hábitat para la Humanidad, con la ayuda de un entusiasta grupo de voluntarios extranjeros, construyeron dos dormitorios y habilitaron un espacio para la cocina; también, gracias a un grupo de trabajadores de Chilectra, que ganaron un proyecto para apoyar esta iniciativa, dentro de su empresa, se realizaron todas las terminaciones eléctricas de los dormitorios.

En este hermoso trabajo conjunto, la Municipalidad de Lo Espejo, no se quedó atrás, ya que se encargaron de mejorar el baño, la techumbre y realizar arreglos en las áreas comunes.

Ahora, Benjamín tiene 7 años y gracias a todas estas manos generosas, espera su trasplante en un lugar más cómodo, bonito y adecuado, para que el día que reciba sus riñones, pueda recuperarse tranquilo en su hogar, con su familia y tener una vida más feliz.